He de reconocer que pasé cuatro meses de Erasmus casi en Poznań, por lo que no es raro que tenga de la camiseta del Lech y sepa al menos chapurrear Legia kurwa jest. El caso es que a él le debo la mitad de mi año en el limbo, bebiendo cerveza portuguesa y aprendiendo a conseguir sexo oral fácilmente en el Este. Amén de hacerme un poco menos ignorante en fútbol, cine, música, libros, Irlanda, Europa, vodka y hasta hockey sobre hielo. Dziękuję.
Kocham Cię, Geor.. I mean , Charles.
[Y que nadie me diga nada de mi fluído polaco]
En realidad es más de vodka que de cannabis y más de metal que de ska.
2 comentários:
no hay chinas! no hay chinas ooooooooooiiiiiii!!
(8)
Los países del este son unos aguilillas, y más predecibles que le papa en una misa.....
he dicho!
uhuhu...
:)
Enviar um comentário